Esta idea, aunque ya un poco "pasada" (es de diciembre), surgió de un artista chino que, durante cien días, recolectó suciedad y partículas de polvo del aire de Pekín -una de las ciudades más contaminadas del mundo-. Esta tarea la realizó mediante un recolector que podría definirse como una aspiradora ultra eficiente que era capaz de recoger partículas más pequeñas que cualquier otra.
Esa neblina que hay casi todos los días en Pekín es "smog", el nombre dado a la niebla surgida de una mezcla de humos y contaminantes que se mantienen a la altura del suelo. |